Hace al rededor de 35 años, 1976, un joven llamado Steve Wozniak inventa un aparato para su uso personal que sin pensarlo se convierte en su camino a la fama y riqueza, el Apple I.
Hecho a mano y sin planes de hacerlo comercial, el Apple I le abre la puertas a Apple Inc. cuando a un amigo de Wozniak, Steve Jobs, se le ocurre la brillante idea de vender tal creación.